The White Box - Cancún

Este restaurante solía ser un gastrobar con un menú de hasta diez tiempos; hoy en día solo ofrecen cuatro platillos y las opciones son algo limitadas. Pedimos fish and chips: pescado empanizado frito acompañado de un aderezo para dipear y un cóctel “vuelve a la vida”. Ambos estaban bien, pero no excepcionales. Como plato fuerte pedimos un costillar de cerdo y un filete New York: ¡MALOS! La carne era dura para cortar, un poco seca y difícil de masticar. Los cubiertos resultaron inservibles para comer decentemente esos platos. Al final, el postre salvó el día: ni muy dulce ni muy salado, justo en su punto. Los refrescos eran gaseosos o completamente insípidos y sin gas, provenientes de botellas de 2 o 3 litros que, quién sabe, desde cuándo llevaban en bodega.

Algo interesante pero no del todo. Las habitaciones y el personal que sin propina no trabajan. Servicio: Comedor Tipo de comida: Desayuno Comida: 4 Servicio: 3 Ambiente: 3

Gracias por la cena. Sin duda, fue una experiencia especial que te hace sentir único. Agradezco a Julio por estar atento a nuestra mesa y asegurarse de que no nos faltara nada. Al principio, el servicio fue un poco lento porque creo que todos o casi todos llegamos al mismo tiempo, ¡pero después todo fue rápido y delicioso! Sin duda, probé sabores que jamás imaginé haber comido y unas salsas deliciosas. Regresaría sin dudarlo. Solo una recomendación: ¡no limpien los asientos de bebé con cloro! Ese es el único aspecto negativo que destaco y por eso le quito la excelencia. No porque sea un bebé significa que su ropa no importe. ¡Tengan cuidado con eso y un poco más de atención!

El mejor restaurante del hotel, son muy amables. El servicio y el sabor de los platillos son espectaculares, ¡lo recomiendo mucho!

Excelente, súper recomendable, lo mejor de Oasis. Servicio: Comedor. Tipo de comida: Cena. Comida: 5. Servicio: 5. Ambiente: 5.