Che Santiago - Lima

Fuimos para el 14 de febrero. La comida y la atención fueron excelentes. Hay variedad (pastas, carnes, empanadas,bebidas argentinas y peruanas, etc). El lugar es muy acogedor y el típico tango te hace sentir en una parrilla de San telmo. Lo único malo es que es un lugar muy chico y la vez que fui tuvimos que esperar afuera hasta que hubiera lugar. Además, al ser un lugar familiar, la atención se demoraba un poco.

Lo principal: la comida. Los cortes de carne no son nada malos, y el precio (en comparación a otros lugares de parrilla argentina que hay en Lima) es relativamente bajo. La ensalada que acompaña es la versión tradicional y bastante simple que suele servirse en estos locales: tomate y lechuga con un aderezo sencillo.Si solamente hubiera que evaluar la comida, no habría mayor problema.Lo que sí se necesita es repensar la atención. La persona a cargo (aparentemente la dueña) es una señora mayor que está acompañada de (según me dio la impresión) su hija. Ambas pueden dar la impresión de ser displiscentes y poco corteses.Creo que esto se debe -al menos por lo que pude observar la noche que fui a cenar- a que privilegian la atención a grupos grandes que tienen reservas de agencias de viajes o de conocidos suyos.Tal vez no les interesa fidelizar a su público, porque lo suyo es la clientela de alta rotación que va y viene... ¡pero pierden la oportunidad de dejar a sus clientes más satisfechos de lo que podrían!Un dato curioso, son sumamente honestos respecto a que el "vino de la casa" es un mal vino... ¡y no se equivocan!

Es uno de mis preferidos en lima, local pequeño, atendido por la dueña, tiene una carne muy buena y dominan la parrilla, merece la pena ir, saldrás satisfecho.

Si quieres un buen churrasco te recomiendo el Che Santiago. La dueña que trabaja ahí nos ha recibido siempre con amabilidad. Ella misma prepara las parrillas. El lugar es sumamente pequeño. Apenas tiene unas pocas mesas, pero es muy acogedor. No es barato para ser sincero, pero vale la pena.

Las parrillas y empanadas que ofrecen son muy buenasno cobran caro, la carne siempre a puntolas papas fritas muy crujientes y de papa amarillalas empanadas tipo salteñas es una de las mejores y hay que acompañarlas de un ají especial que preparan.el espacio es pequeño, quizá medio incomodo.Pero vale la pena visitarlo.Ojo que no es un restaurante de parrillas de lujosu carta es pequeña, pero tiene lo suficiente para salir contento y mas que satisfecho